15 julio, 2007

Madrecloaca


Desde niña he considerado que mi actitud es torpe, mis pasos son muy lentos, mi mirada está vacía y que mi pelo largo y negro me otorgan una armonía que no tengo, que ocultan ese pensamiento perdido, esa sonrisa que aparece de momentos. Bueno, éstas y otras características negativas fueron marcadas con fuego en mi, con cada palabra, con cada lamento, con cada indiferencia y fría mirada de mi madre.

Una forma de dirigirse a mí diferente, como si su misión educativa y formadora se desenvolviera de una manera torcida y maquiavélica con cierta sutil violencia psicológica, y distinto a lo que se pueda pensar, sin gritos, sino con una suave voz enjuiciadora como un trueno. Y también esa constante sensanción de humillación que me llenaba el cuerpo entero.

Cierto es que cada una de sus palabras me hicieron crecer, pero además, me volvieron una persona calculadora, pensante y siempre mirando con un ojo externo las situaciones, una paranoia interminable. Yo... La detesto.

14 julio, 2007

Disonancia armónica


Nada, nada teníamos en común. Sus aires de grandilocuencia, su ostentosidad, su insulso caminar, ¿de donde venía su alma? Parecía sin edad, parecía venir desde el fondo del tiempo. "Su turbia condición de feto, de prostituta o pitonisa, de remotas soledades". Todo eso menguaba más aún mis ideales, pero aumentaba mis emociones, aunque fueran negativas. Los gustos no coinciden, el contraste es claro, pero para mí, el odio es más fuerte, y sentimos repulsión hacia las mismas cosas. Es como ocurre con ese fenómeno físico cuando interfieren las ondas que se encuentran en distinta fase, en distinta posición, y aún así, las ondas se refuerzan constructivamente... En definitiva me hace sentir.

13 julio, 2007

Credo quia absurdum


- ¿Y la fe?

- Menos mal que existe la angustia, ya que fundamenta mi patrón de crecimiento. No puedes saber si una persona te ha perdonado cuando has hecho algo malo. Precisamente por eso es importante para ti existencialmente. Es una cuestión con la que tienes relación viva. Tampoco puedes saber si otra persona te quiere o no. Sólo es algo que puedes creer o esperar. Pero eso es más importante para ti que el que la suma de los ángulos interiores de un triángulo es 180 grados. Y nadie piensa precisamente en la "ley causal", ni en las "formas conceptuales", en el momento de recibir su primer beso.

- No, sería de locos.

- Ante todo es importante la fe cuando se trata de cuestiones religiosas. Kierkegaard escribió: "Si puedo entender a Dios objetivamente no creo; pero precisamente porque no puedo, por eso tengo que creer. Y si quiero conservarme en la fe, tendré que cuidarme siempre de conservar la incertidumbre objetiva, de estar a 70.000 fanegas de profundidad en esta incertidumbre objetiva, y sin embargo creer".

09 julio, 2007

Recuerdo


Estoy triste. Estoy triste y estoy sola, sin refugio, mi carácter no me sirve ni mi hogar tampoco. Estoy triste. Sólo hoy, porque mañana debo levantarme otra vez.

08 julio, 2007

Error de formato


Es extraño lo que se provoca, una motivación distina, algo que a veces entiendo y a veces no. Lo claro es que es una experiencia genial y que pone a prueba a los participantes. Un invasión y contensión simultáneas del exacerbado proceso interno que desemboca de tales estímulos y se ven reflejados en un suave abrazo. El detalle es que soy una novata emocional y muy pocas veces se me ha dado esta expresión y más aún, no sé si es una distorsión, pero esta imagen que es la forma que toma la experiencia en mi cabeza no es la misma que ocurre en mi corazón.